Los muebles escandinavos son una mezcla de minimalismo, funcionalidad y comodidad. Este es el estilo de decoración que está de moda desde hace varias temporadas: sus tonalidades neutras, sus colores vivos y sus estampados gráficos han conquistado a muchos aficionados a la decoración.
¡Al adoptar el estilo escandinavo, adoptas un estilo atemporal, inspirado y respetuoso con la naturaleza!
EL bandera
El blanco es un color imprescindible, es imprescindible elegir un color claro para aportar luminosidad a tu estancia. El blanco en tus paredes resaltará tus muebles y le dará un estilo minimalista a tu espacio. Así, la decoración escandinava enfatiza los tonos blancos y de madera, pero también los tonos pastel y neutros para crear un ambiente cálido, chic y elegante.
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EL muebles
El mobiliario juega un papel determinante en el estilo nórdico y la silla es el mueble escandinavo por excelencia. Le dará carácter a la estancia gracias a su estilo tan particular. De hecho, generalmente está diseñado con formas redondeadas y presenta tonos claros y neutros que le dan ese efecto moderno y acogedor sin abrumar el espacio.
Muebles acogedores
la luz
¡Céntrate en la iluminación para un interior cada vez más luminoso! Lámparas colgantes, lámparas, focos geométricos… son ideales para completar tu decoración escandinava, sobre todo si no tienes un interior muy luminoso. Estos elementos aportarán relieve y luminosidad a la estancia sin quitar el aspecto refinado propio del estilo nórdico. Por último, para preservar la iluminación natural, piense en visillos en lugar de cortinas. Permitirán la entrada de la luz del día manteniendo esta sensación de capullo e intimidad.
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los materiales
La elección de los materiales jugará un papel importante. Como el estilo escandinavo se inspira en la naturaleza, la madera es un material imprescindible. Las maderas claras como el ratán, el abeto, el pino, el roble o incluso el abedul combinan perfectamente con los colores claros y suavizarán tu habitación para darle calidez. Combínalo con textiles suaves como lana, ante y algodón para hacer de tu interior un nido acogedor.
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menos es más
Si quieres hacer tuyo este estilo, la simplicidad es la palabra clave. De hecho, la decoración escandinava es sencilla y práctica. No se trata de tener un interior blanco, minimalista y sin vida, sino de evitar demasiados adornos y excesos de elementos decorativos que puedan apelmazar un El interior ya es muy estético.
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Desde los materiales hasta los colores, ya conoces todos los mecanismos del estilo escandinavo que ya no te guardarán ningún secreto.
